Por rincones y conciencias

A mi querido amigo Lucas Berrocal,
en el 50º aniversario de su ordenación
como sacerdote.

Resulta difícil de verdad
Muy difícil escribir
De alguien algo
De quien apenas sabes
Menos de la séptima
Parte de su vida
Y eso que en los ochenta
Pudieron cruzarse
Nuestros caminos por el Santo
Ángel o San Isidro
De Alcalá de Henares.

Pero sí que se puede
Escribir de esta parte, de este tiempo
Cómo él, cómo Lucas
Ha influido en tu vida
Eso sí, eso sí se puede decir.

Sobre todo quien lo vive
Lo ha vivido. O ha sido tocado
Por algún destello
De la misma gracia
Que en él se posa
Y cómo sus palabras
Su entrega parroquial
Se proclaman, se difunden
Por rincones y conciencias.

Fue tardío nuestro primer encuentro
Pasábamos de los cincuenta, los dos
Ya en el nuevo templo
Nuestra Señora de Europa
De la mano del común amigo
Vicente, quien persiste en el empeño.

Tuvieron que pasar otros diez
Años para el nuevo encuentro
La persistencia dio su fruto
El Espíritu Santo aprovecha todos los resquicios
Con los que vivíamos alejados
Y así nos vimos, cara a cara
Un sábado de enero
Y decirle porqué estoy allí
A verlo, o mejor
Porqué creo que estoy allí
Hoy creo otra cosa.

Le doy mi carta de presentación
Reflexiones propias tras haber leído
Las ORIENTACIONES MORALES ANTE LA SITUACIÓN
En España, de la Conferencia episcopal Española
Corría el año dos mil siete.
Y yo insisto en contarle
Porqué estoy allí
Y le hablo de los libros
Que acabo de leer
De contenido religioso, claro
Y me escucha atentamente
Hasta que me oye citar
Mi última adquisición, para leer
El NUEVO DICCIONARIO PASTORAL
De Casiano Floristán
¡Anda…! ¡Anda…!
Si eso está trasnochado
Deja eso y lee si quieres
El JESÚS DE NAZARET
De Benedicto XVI.

Un abismo se abre ante mí
En aquel momento al oír sus palabras
Hace ya once años
De aquel sábado, de enero.

Al poco me incorporo
Al grupo de evangelio
De los martes con él
Sí, con Lucas Berrocal.

¿Qué dirán mis amigos…?
Los de toda la vida, me pregunto.
Y creo que, ahí empieza todo
A morir a mi hombre viejo
A nacer a mi hombre nuevo.

Luego vino la escuela de Teología Básica
Siguiendo el Catecismo
De la Iglesia Católica
No puedo olvidar de entonces
El encuentro con María, la Virgen
Tras sus palabras
Sobre la Anunciación:
“El universo se paraliza
En espera de su respuesta”.

En uno y otros grupos
He compartido la profundidad
Sus reflexiones teológicas y espirituales
Que vive y que transmite
Desde lo profundo de su fe
Con plenitud desbordante.

Viendo la Vida, la Pasión
La Muerte y la Resurrección
De Nuestro Señor Jesucristo
Con momentos de hondura espiritual
Solamente posibles
Cuando se está tocado por la Gracia
Compartidos con él además
En retiros espirituales
O en aquel primer encuentro
O en la preparación de mi viaje
Con Encarnita a Tierra Santa
En casa antes de partir
Parecíamos vivir con él
Los pasos de Jesús
Por la Vía Dolorosa
Camino del Calvario
O de María en Nazaret
Ante una guía de Jerusalén
Y una copa, a altas horas
De la madrugada.

Claro que es verdad
Que a veces los genios
Nos arrastran si no los conoces
Pero eso es otra historia.

Gracias Lucas
Por ser lo qué eres
Quién eres, y por la Gracia
Que vive en ti y que transmites
Y has compartido tantos años
De tu vida en la Iglesia
De tu vida parroquial
Que invita a que muchos
Abracen la fe
Dejarlo todo y seguirle
Como tú aquel 1969
Tomaste el camino vocacional
Que hoy aquí todos celebramos.

¡FELICIDADES LUCAS!
¡ENHORABUENA!
¡FELICIDADES NUESTRA SEÑORA DE EUROPA!

Madrid, a 22 de junio de 2019
Javier Bodas Ortega

 

    

 

  

 

  

 

  

 

  

 

  

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