«Joel
De Joel, profeta de Judá e hijo de Fatuel, nada sabemos fuera de los tres capítulos de profecías que llevan su nombre. El tiempo de su actividad ha de ser calculado después de separarse de la casa de David las diez tribus, pero antes del destierro. El hecho de que solamente se mencionen los sacerdotes, y no los reyes, hace conjeturar que Joel haya escrito en tiempos del rey Joás de Judá (836-797) cuando el Sumo Sacerdote Joiadá en nombre del rey niño manejaba las riendas del gobierno (IV Rey. 11). Una minoría de exégetas ubican a Joel en el periodo después del destierro, fundándose especialmente en 3, 6, donde se mencionan los griegos (cf. Nácar-Colunga). Su anuncio, como dice este mismo autor, es escatológico, cosa que no debe olvidarse al interpretarlo.
En el primer discurso profético describe Joel una plaga terrible de langostas, fenómeno conocido en Judea, como figura del oprobio de Israel por parte de las naciones. Ello da ocasión al profeta, en el segundo discurso (2, 18-3, 21), para exhortar a Israel a la contrición y anunciar el «día del Señor» y el juicio de las naciones o castigo de los enemigos del pueblo santo, y el reino mesiánico, siendo especialmente de notar la aplicación que San Pedro hizo de esta profecía (Hech. 2, 28-31) el día de Pentecostés, a los carismas traídos por el divino Espíritu.»
Fuente: https://www.aciprensa.com/Biblia/joel.htm
«El Libro de Joel es un libro bíblico del Antiguo Testamento y del Tanaj hebreo. Se lo considera uno de los así llamados «Profetas Menores» (en relación a la extensión del texto, no a la importancia de su contenido) y se encuentra ubicado, en las biblias cristianas, entre los libros de Oseas y Amós.
Autor
No sabemos nada de la persona del autor, ya que la profecía sólo indica que era hijo de un señor de la época llamado Petuel. Su nombre significa «Yahvé es Dios»
Se cree que procedía del reino de Judá o reino del sur y que su prédica se desarrolló en Judá y Jerusalén por sus referencias a dichos lugares, al Templo y al culto.
La uniformidad léxica y estilística de Joel a lo largo de todo el texto permiten atribuirlo a la mano de un solo autor.
Contenido
El libro de Joel se encuentra dividido en dos partes claramente diferenciadas. En la primera, una devastadora plaga de langostas destruye el país, produciendo una celebración penitencial entre las víctimas. El episodio está tratado como una narración histórica.
Yahvé se compadece de los judíos y promete poner orden, a cambio de expiación, oración y ayuno. Dios anuncia la llegada del terrible «Día de Yahvé», poblado de fenómenos astronómicos horrorosos, la aparición de una prodigiosa fuente de agua en medio del Templo y la fertilización de la tierra azotada por la langosta gracias a esta agua (3:18). En los días de tales episodios, Jerusalén será, toda ella, un templo. Esta sección está narrada como profecía escatológica.
La segunda parte del texto se eleva por encima de las disquisiciones históricas y se transforma en un texto completamente escatológico. Entre sus anuncios se encuentra la efusión del Espíritu y su derrame sobre la tierra, la restauración del Edén y el enjuiciamiento a que Dios someterá a las naciones humanas.3
Sentido religioso
Pedro explicó por inspiración que el derramamiento del Espíritu de Dios en los discípulos de Cristo era un cumplimiento de la profecía de Joel, (HCH.2:1-21). Pedro recalcó el significativo profético de las palabras de Joel: «Y todo el que invocare el nombre de Jehová será salvo»(Hch.2:21) Existen similitudes en Ap.9, con la plaga de langostas que describe Joel.4
La enseñanza primordial de este libro es que el arrepentimiento y la penitencia llevan al hombre a reconciliarse con la divinidad. Dios reserva las bendiciones para los tiempos mesiánicos, por eso Judá sufre tanto ahora.
No hay modo de escapar, excepto por la oración, el ayuno y la penitencia, para implorar a Dios perdón y ayuda hasta que lleguen los gloriosos días en que Su Espíritu se derrame sobre todos los seres humanos.»
Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Libro_de_Joel